Ante la generosidad de los organizadores del acto, y tratándose del grupo político PODEMOS, tuvo la ocurrencia de instruirnos sobre la ilustre presidenta manchega, María Dolores de Cospedal (la "Cospe" para los amigos).
Aquí les dejo la grabación de momento tan irrepetible.
Como es de ley, también nos dejó copia de su romance, que aquí dejo para el solaz de la ciudadanía y por si alguno considera conveniente su uso, ya que nuestro bufón se precia de utilizar licencias Creative Commons.
Romance
de Cospedal
La
provincia de Albacete,
de
gente sencilla y llana,
tiene
gran predicamento
por
tener gente afamada.
En
el arte del balón,
cuando
hay que hacer filigranas,
el
genio de Fuentealbilla,
Andrés
Iniesta se llama.
Subido
en un escenario
y
diciendo mil chorradas,
tenemos
a un individuo
y
a toda su muchachada.
Se
trata de Joaquín Reyes
con
sus chistes y bobadas,
que
imita a Ferrán Adriá
y
la imitación la clava.
Pero
lo más destacado,
de
esta fauna castellana,
son
políticos ilustres
que
gobiernan nuestras almas.
Procedente
de Salobre
y
socialista cabal,
aunque
estudió con los curas
y
es bastante clerical,
tenemos
a José Bono.
Pero
hoy de él no quiero hablar.
Aunque
nacida en Madrid,
del
Bonillo ella dimana.
Nació
en el sesenta y cinco,
Maria
Dolores se llama.
Quiso
licenciarse en leyes
en
una universidad privada,
cuando
acabó sus estudios
del
estado fue abogada.
En
el año dos mil seis
en
el senado descansa,
pues
no fue hasta el dos mil diez
cuando
pidió la palabra.
Y
como premio ese año
el
partido la nombraba
secretaria
del partido
y
presidenta en La Mancha.
Eso
da mucho trabajo,
pero
también deja pasta:
ganó
doscientos mil euros,
parece
buena soldada.
Hay
que ver qué mona es,
si
me parece una santa,
con
su teja y su mantilla,
con
su flema castellana,
de
sempiterna sonrisa,
tan
católica y cristiana,
pero
según mi opinión
se
ha pasado de beata.
Por
eso me choca tanto
que
siendo tan timorata,
para
tener a su hijo
sin
joder quedó preñada.
Pero
en lo que esta señora
es
experta y destacada,
es
en las ruedas de prensa,
diciendo
barrabasadas.
De
Bárcenas no se fía,
le
ha metido una demanda,
porque
en la prensa ha salido
lo
que en los sobres les daba.
Pero
todo esto es mentira,
pues
él ya no trabajaba
donde
tenía el despacho,
él
allí ya no hacía nada.
Y
cuando algunos dudaban,
y
hacían caso al que difama,
entonces
habló Dolores,
bién
oiréis lo que ella hablaba:
― En
diferido fue hecha,
la
indemnización pactada
y
al ser hecha en diferido,
era
más bien simulada
de
lo que hubiera sido
partirle
lo que cobraba,
con
toda la retención
que
corresponde a la paga,
que
la seguridad social
la
tiene bien regulada. (¿Eh?)
Pues
aquí se quiso hacer
como
la ley obligaba.
¿Ustedes
lo han entendido?,
con
lo bien que se explicaba,
si
no hay cristo que la entienda,
y
la está liando parda.
Si
se ha inventado un idioma,
llamado
cospedalés,
que
cuando quieres usarlo,
todo
te sale al revés.
Pero
todo esto son bromas,
que
lo suyo es gobernar,
aplicando
mano dura
para
todo el personal.
Lo
mismo cierra una escuela,
privatiza
un hospital,
despide
trabajadores,
o
les baja su jornal.
Pero
no es porque ella quiera,
cuánta
lástima me da.
Ella
sigue directrices
del
partido popular.
Y
para colmo de males
se
ha tenido que casar
con
el pobre don Ignacio,
pobre
de solemnidad.
Menos
mal que la señora,
como
es íntegra y leal,
ha
movido algunos hilos
y
lo ha puesto a trabajar.
Siempre
como consejero,
porque
sabe aconsejar,
pero
sólo en once empresas,
porque
no ha podido en más.
Y
todo gracias a ella,
Dolores
de Cospedal.
MORALEJA
Con
su recto proceder,
Cospedal
nos ha enseñado
que
aunque no nos lo parezca
enriquecerse
no es malo.
